En un contrato de factoring podemos distinguir los siguientes elementos: el factor, el cliente y el deudor. El factor es la entidad que presta el servicio de factoring (DGF). El factor se encargará de adelantar y gestionar el cobro de las facturas con la Administración Pública. El cliente o cedente en un contrato de factoring es el empresario que anticipa el cobro de sus facturas, transmitiendo la responsabilidad de su cobro al factor. Por último, en el caso del factoring público, el deudor del cliente será la Administración Pública. Sus facturas o cobros pendientes serán cedidos a la empresa factor (DGF).