Quiebra Oproler, la constructora madrileña beneficiariadel pago del 3% a la Generalitat.
No obstante, la constructora ya había sido requerida jurídicamente por varios contratistas para hacer frente a unos pagos con los que tenía retrasos importantes, estaba abonando facturas de proveedores a una media de casi 120 días al año, cuando el límite impuesto por las administraciones públicas es de un máximo de 60. La sociedad arrastraba un pasivo de 66 millones de euros, la mayoría de deuda con suministradores.
Como constructora, deja en el aire más de 600 viviendas en Madrid, unas 26 promociones afectadas y un proyecto de viviendas de lujo en el centro de la capital y ya ha paralizado las obras de remodelación de un edificio de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) de Madrid, en concreto, del edificio Sanchinarro VI, que alberga 150 viviendas de protección oficial.